En Destru[Pack] nos sentimos como en el famoso cuento clásico de Hans Christian Andersen somos diferentes y nuestros “hermanos” (la competencia) nos menosprecian. Hay que saber apreciar las diferencias desde un punto de vista objetivo. Ser diferente no debe preocuparnos, ya hay muchos que empiezan a apreciar nuestras características.
Nos abstenemos de decir que los patos normales sean realmente feos pero al lado de un cisne no hay comparación. Lo mismo nos pasa con nuestros camiones de destrucción móvil no es que nuestra competencia no sea capaz de triturar, simplemente es que nuestros equipos son infinitamente mejores, y por eso en lugar de valorar cada uno sus capacidades recibimos críticas, en lugar de reconocimientos de nuestro sector en España.