Debemos saber el verdadero significado y las garantías que están dando

Un certificado de destrucción de documentación tiene el valor que le queramos dar, lo emite una empresa y la legislación no le obliga a nada. Legalmente y en caso de conflicto hay que ajustarse a lo escrito, y si no está conforme con lo que ha descubierto deberá usted demostrar lo contrario, tendrá lo que los letrados llaman “la carga de la prueba” y todos sabemos que le será imposible demostrar que esos eran los documentos que recogieron en sus instalaciones en alguna fecha…

Un certificado de destrucción significa que los documentos han sido destruidos, si no se especifica algo más eso es muy poco. Destruidos en la China y dentro de 6 meses, sin que nadie mantenga una cadena de custodia sobre esa información es lo más habitual. Si además añaden que sigue procesos de reciclado o medioambientales, ¡Genial….!  Nadie se guarda el papel para adornar los almacenes, simplemente comercializan con el papel obtener un rendimiento económico. Algunos añaden cumpliendo la norma DIN nivel 3 o 4 …. Palabrería ya que esa es una norma alemana y solo es una referencia, nunca un estándar legal en España, sirve para confundir a los incautos y hacerles creer espejismos. Sirve de argumentación para los “trileros”…

Destrucción garantizada: Destru[Pack] le emite un certificado de destrucción según los procedimientos AAA-NAID Certifiedlo que nos obliga a cumplir unos protocolos muy estrictos. Además  nos hacen un seguimiento con auditorías por sorpresa y visitas anuales efectivas, con la supervisión de un comité disciplinario que busca mantener los más altos estándares del sector en el mundo y proteger del intrusismo o las malas prácticas en este sector a nivel mundial. Ofrecemos una garantía de destrucción real y no le hacemos creer algo o le prometemos cosas sin fundamento.

Procedimientos inadecuados y la falta de responsables es normal en España

Usted debe valorar el tamaño de partícula debe ser totalmente irrecomponible y nunca fuera de normas. Pero no se deje guiar por las empresas que solo hablan del tamaño de destrucción, lo importante son los procesos y quien interviene en ellos. Cualquiera monta un triturador pero somos muy pocos con plantas seguras debidamente auditadas, y con personal experto. Incluso hay muchas empresas que subcontratan. El tiempo máximo de destrucción, la custodia en todo momento, el evitar la manipulación o el copiado, el control de grabaciones de CCTV, sistemas GPRS para vehículos, etc deben ser criterios que investigar antes de contratar y escoger a su proveedor.

Es su responsabilidad como propietario y contratante conocer que sucederá con su documentación confidencial, de ello depende el futuro de su organización ya que una mala gestión puede arruinar su reputación o implicar a su entidad sanciones muchas veces inasumibles.

Recuerde que los recicladores no garantizan la no manipulación, el momento de la destrucción, ni el lugar, ni la formación de su personal… Por lo tanto pueden seleccionar las calidades de papel, y destruir cuando y donde quieran. Exíjales cuando y donde destruyen. Investigue de que medios disponen y que garantías ofrecen en caso de incumplimiento y/o auditoría. Piense que los recuperadores tienen como base del negocio obtener el máximo valor por el papel resultante. Buscan la venta del “papelote”. Lo que entra en conflicto con la garantía de seguridad que es la base de empresas de gestión confidencial como la nuestra, somos una empresa de servicios y la diferencia de calidad es contrastable. Por otro lado empresas de pequeño tamaño ofrecen simpatía pero no son capaces de ofrecer las garantías en caso de siniestro con pólizas de responsabilidad civil, y ofrecen el compromiso del propietario pero esta se pierde cuando hay empleados que ejecutan los procedimientos y no disponen de protocolos efectivos y eficientes.